[EVENTO ACTIVO]
Biatha era una joven maga del Kiri Tor con un gran potencial en las artes de escarcha, no había hechizo que no pudiera dominar, incluso su habilidad sobrepasaba la del Gran Mago Antonidas.
Pero todo eso fue solo en su juventud, con el paso del tiempo su cuerpo envejecido no podía soportar la gran cantidad de magia que en sus tiempos jóvenes soportaba, por lo que busco un método para mantener o incluso volver a ser joven.
La magia usada por los magos del Tirisfal para mantener la juventud requería de un cuerpo joven, cosa que ella ya poseía, por lo que busco una solución en la Nigromancia.
Pasaron los años y Biatha consiguió comprender gran parte de esta oscura magia, pero era demasiado tarde cualquier hechizo que lanzara le llevaría a quebrar su propio cuerpo, por lo que en un último acto de desesperación convenció a un joven mago para que la transportara a las tierras en las que hoy conocemos como Desolace, donde con sus últimas fuerzas lanzo un hechizo contra su propio cuerpo para que los próximos nigromantes que aparecerían levantaran sus restos y pudiera volver a seguir ejerciendo la magia y más aun con un tiempo ilimitado de vía conseguiría dominar la magia de todo el mundo.
Pasaron los años y los restos de Biatha seguían en Desolace enterrados en la arena, hasta este momento el clan filo ardiente posee los restos de la hechicera han preparado todo para su alzamiento, con el fin de usarla para devastar todo Kalimdor y los posteriores continentes.
El modo de como han descubierto los filo ardientes los hechizos para levantar a la hechicera se desconocen pero lo único cierto es que Biatha esta en pie.
El Kirin Tor ha sido informado de los acontecimientos y pide ayuda a vosotros héroes para acabar con el mal que los filos ardientes y Biatha puedan generar en este mundo.
La mision empieza en el npc
Archimago TiemporejaLuego tan solo teneis que ir a Desolace y matar a
Biatha --------------------------------------- - -----------------------------------------------
Los héroes están celebrando la victoria, pero en lo más alto de una colina se encuentra un diablillo el cual por su cara muestra desesperación.
En ese momento una persona encapuchada aparece por un portal y acercándose al diablillo le dice:
“Te dije que eran fuertes, hubiera sido bueno poner una barrera o algo para ocultarla, pero no me hiciste caso”
El diablillo lo mira con cierto odio en sus ojos y con un tono de voz de enfado y responde:
“Maldita sea, se supone que ella lo reviviría, pero ahora será imposible.”
“Tranquilo, hay muchas formas de conseguir lo que querías, pero esta vez tendrás que hacerme caso”, le replicó el encapuchado. “Este plan era demasiado arriesgado, hay que usar su propia fuerza y ganas de victoria contra ellos, pero yo siempre pienso varias opciones en caso de algún problema.”
“Entonces podré conseguir lo que deseo”, dijo el diablillo con un tono más calmado.
“Si, y nuestro primer paso es ir a Tuercespina, te explicaré los detalles por el camino y esta vez obedecerás”
Mientras que el encapuchado sacaba de un bolsillo una especie de piedra con algo en su interior, la cual abrió un portal por el que partirían, el diablillo mostraba esta vez una cara más típica de ellos con una sonrisa de oreja a oreja y pensado para él mismo “Lo conseguiré”.